viernes, 21 de septiembre de 2007

La última morada de Capagris


Y no todo son alegrías en el blog.
Finalmente murió Capagris, la gata que me acompañaba desde hace más de quince años.
Su muerte fue bastante tranquila, empezó a respirar con mucha dificultad hace unos cuatro días, dejó de comer y se debilitó rápidamente, quedándose muy quieta hasta que falleció.
Como antes hicimos con Cajou, la llevamos a enterrar en el jardín del fondo de la casa de mis suegros. Quedó en la esquinita, en el rincón que mi suegro con su afición por los carteles y decoración, rotuló con un "A mis amigos". Para mí, más que amiga, fue casi una hija.
Ahora la tierra la cobija, los árboles le darán sombra y se hará parte del jardín. Ya deja nuestras vidas y se transforma en recuerdo, deja de ser gata y pasa a ser memoria.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No hay mucho que agregar. Lamento no haberme enterado antes, sé lo que significaba Capa Gris en tu vida. Si parece que era ayer que saltaba en el depto. de Once de un solo ambiente al borde de la ventana ... de un ? 6to. piso ?
Se la va a extrañar.