domingo, 5 de julio de 2009

En el sillón


Estas son fotos del mes pasado también, Helena muerta de risa jugando en el sillón de la mamá... Por supuesto, ahora se sube y se baja sola, aunque alguna vez todavía se distrae y se pega un golpe por bajar mal.
Ahora ya tiene bastante pelo y Alejandra y las chicas del jardín le hacen distinto peinados. Este plumerito es uno de los preferidos.

En el parque, en junio


Pero por supuesto, después de tanto tiempo, no los iba a dejar sin fotos...
Rompo la continuidad previa y subo algunas fotos actualizadas, más adelante retomaré las atrasadas de hace un año.
Estas son del mes pasado, de junio y con frío. Igual salimos al parque y como hacía más frío del que pensábamos, le presté mi bufanda a Helena. Claro, a ella le queda mejor que a mí...
Al día siguiente Alejandra corrió a comprarle una bufanda de polar, mucho más bonita. El saco que le trajeron los abuelos de sus vacaciones también es muy lindo y a ella le gusta mucho.
También sacamos fotos de hamacas, busquen la anterior y comparen el tamaño... ya casi no cabe en estas.

regreso y "Los errores de Noé"

Antes que nada, tengo que pedir disculpas por el largo tiempo que estuve alejado del blog.
Muchas cosas pasaron en ese tiempo y muchas cosas ocupan mi tiempo.
Me recibí, finalmente hice la defensa de mi tesis, que era una asignatura pendiente desde hace mucho.
Empecé un curso para aprender a conducir un auto y pronto daré el examen, a ver si obtengo mi licencia. Otra cosa largamente postergada.
Entré en Facebook, y es impresionante la cantidad de alternativas para perder tiempo que proporciona...
Estoy preparando el concurso de programación que se hará con la conferencia internacional Smalltalks 2009. Y, por supuesto, seguimos criando a nuestra hijita, que tanto espacio de este blog y de mi vida llena.
Todo eso me ha mantenido lejos... y probablemente lo siga haciendo. No puedo actualizar el blog con la frecuencia que quería. Haré lo que pueda y trataré de que sigan viendo crecer a Helena y a nosotros.

Por lo pronto, para cortar un poco con las fotos, les cuento que ayer fuimos a ver una obra de teatro. Dejamos a Helenita con mi madre, ya dormid, y fuimos a ver Los errores de Noé, por invitación de un primo de Alejandra que actúa en ella.
Quedamos muy satisfechos con la obra. Es una obra muy intensa, dura, con una puesta en escena mínima y sólo tres personajes. Dura un poco menos de una hora pero, como dije, es muy intensa y dramática.
Es una situación en el Proceso, eso de por sí ya es duro. Les copio algunas partes de la gacetilla:

Se representará todos los sábados a las 23, en el Espacio El Fino (Paraná, 673 1º TEL. 4372-2428). Las entradas valen $25 ($20 para estudiantes y jubilados).

“Los Errores de Noé es un historia de sueños, miedos y silencios. Un director de teatro, un vestuarista y Ella. Un acto, durante la última dictadura, que podría cambiar la historia de Argentina y, sobre todo, la de ellos”, asegura Yoska Lázaro, director de la obra.

ACTÚAN Yamil Chadad I Fernando García Valle I Gabriela Blanco

PRODUCCIÓN GENERAL Producciones Zafiro

DIRECCIÓN Y DRAMATURGIA Yoska Lázaro

Sinopsis

Extraída textualmente del Archivo Nacional de la Memoria:

“La trama refleja el deseo de un director de teatro de aprovechar los festejos que, por el primer año de la dictadura militar, llevará a cabo el gobierno de facto, para presentar una obra que pondrá en evidencia mundial el terror, la violencia y el sometimiento que se está viviendo. Dicha iniciativa será apoyada por un grupo de intelectuales y artistas exiliados que volverán al país para realizar estos actos de repudio y manifestación social.”

Acerca del Plan de Osvaldo Bayer

“Yo había ideado un plan para que los hombres de la cultura que estábamos en el exilio le asestáramos un golpe al Proceso. Cuando se supo que Videla iba a pasarle el poder a Viola, el gobierno militar anunció que se recibiría a delegaciones extranjeras. A mí se me ocurrió que ése era el momento para que los intelectuales exiliados volviésemos al país de manera sorpresiva. Estaba todo calculado. Ibamos a alquilar un avión, y la Iglesia Evangélica Alemana nos iba a ayudar con el financiamiento. Lo único que nos había pedido era que en ese retorno nos acompañaran otros intelectuales reconocidos. Nuestra idea era que fueran Juan Rulfo, Gabriel García Márquez, Günter Grass y varios otros...” El director de esta obra se basó en este plan, que le disparó ideas plasmadas en un relato donde la actuación es, en sí misma, su principal protagonista. Un actor social, en aquella época; un actor en el teatro, hoy.

Yo la recomiendo ampliamente, está muy bien actuada, es super-interesante y muy propicia para pensar y movilizar cosas. Les recuerdo, los sábados a las 23 en Paraná 673 1º. Eso sí, llamen para reservar porque es muy chico el espacio, tiene sólo 25 localidades y se llena.