Ya en el viaje de vuelta, pasamos un buen rato en el Aeropuerto Charles De Gaulle, en París. Tiene un diseño bastante notable, por momentos se logran vistas con un toque de surrealismo, en pasillos interminables con techos muy curvados. Y no saqué la parte donde la rejilla metálica del techo vidriado bajo la lluvia simula una pantalla con estática. Ni las infinitas costillas de maderacon ventanucos en otros pasillos. Quedarán para otro viaje.
Estas son las últimas fotos de Amsterdam que publico por el momento. Dejé para el final el cholulismo turístico: la casa de recuerdos con el molino en maqueta gigante en la vidriera; el zueco grandote para que los turistas nos fotografiemos, característico de la zona; los taxis ciclísticos, versión europea del cooli chino.
Vi muchísimos edificios de arquitectura notable. Aquí recogí sólo algunos de los que más me gustaron. Por supuesto, me tira mucho más el estilo clásico que el moderno. Y en un día de sol, se lucen mucho. También pueden ver que no estaba yo solo disfrutando del mediodía soleado...
Algunas vistas más de este elemento acuático tan típico de Amsterdam. Más casas flotantes, uno no llega a aburrirse de eso. Y una foto de puente de las que tanto me gustan, rodeado de otros turistas.
Continuando mi paseo del sábado, vi muchas cosas.
Las fotos no son muy buenas, pero está ese par de semileonas aladas con reminiscencias asirias, cuidando la entrada del parque. Me recordaban esa escena de la Historia sin Fin...