domingo, 26 de agosto de 2007
Los tíos Ferro
En distintas visitas fueron llegando mis hermanos, a sacarse fotos con la bebita en brazos. Todavía falta uno... ¡Veremos si llega antes del primer cumpleaños!
Selva Negra
Esta es la famosa Selva Negra, la mejor y sin duda la más famosa de las tortas que prepara mi suegra. Centro de muchas reuniones y muestra de su habilidad de repostera, esta torta no la encontrarán en ninguna confitería, ni siquiera en las mejores. Esta auténtica receta europea no lleva masa de harina, sino una mezcla de chocolate, galletas, dulce de frutas finas y crema.
sábado, 18 de agosto de 2007
ATA (7) - Los Montaraces del Amor
Es un grupo que recrea temas conocidos con letras tolkienianas. Para dar un par de ejemplos, Surf in USA de los Beach Boys, se transforma en Surf en Rivendel y Por la vereda del sol de Diego Torres se transforma en Por la vereda a Mordor.
Desde que los escuché en RadioNumenor, esperaba la ocasión de verlos en vivo y hoy pude hacerlo.
Fue una gran satisfacción, y además aproveché para adquirir toda su discografía (bueno, son 3 discos).
ATA (6) - El rol, presente
ATA (5) - Combates
ATA (4) - Dibujos
ATA (3) - El espejo de Galadriel
En otro espacio habían recreado (con un maniquí) la imaginería del Espejo de Galadriel. La impresión se completaba con música ambiental New Age, el sonido del agua corriendo en la fuente y iluminación suave, todas cosas que la foto no captura muy bien pero generaban un ambiente especial (si uno le ponía imaginación, claro - pero a eso vamos).
ATA (2) - Dragón y tesoro
Convención de la ATA - 30 años del Silmarilion (1)
ATA es la Asociación Tolkien Argentina, una agrupación de agrupaciones que nuclea a los fanáticos, seguidores e interesados en diversos grados por la obra de J.R.R. Tolkien, autor de El Señor de los Anillos.
Cada año la ATA organiza una gran reunión en Buenos Aires con la participación de gran número de personas. Se preparan distintos eventos relacionados con la obra de Tolkien y temáticas afines: charlas, presentaciones de libros, grupos musicales, talleres, juegos de rol y por supuesto, stands de venta de todo tipo de artesanías.
Los dos últimos años se organizó en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, que queda bastante cerca de casa, así que tuve la oportunidad (y casi la obligación) de pasar a ver los stands, comprar algunas pavadas y saludar conocidos.
Aquí vemos dos de los stands, en uno de ellos simpáticos dragones colgantes sobrevuelan joyería, mientras que en otro el cartel (que no se lee) ofrece besos de Baya de Oro (la niña disfrazada) por $5. No compré esa mercancía, pero tenían un licor de huevo muy bueno también...
jueves, 16 de agosto de 2007
Tomando la mamadera
En la primera visita al pediatra, nos dijo que no había subido nada de peso en la primera semana, así que desde entonces tenemos que darle un suplemento de leche en mamadera.
A Alejandra mucho no le gusta, porque ella quería alimentarla exclusivamente con el pecho. Pero en la siguiente semana la bebé subió medio kilo, así que seguimos con la mamadera.
Así, todas las comidas tardan un poco más de tiempo, ya que toma primero el pecho y después la mamadera. Todo sea porque suba de peso y no me salga anoréxica.
Caracolito
Más upa
martes, 7 de agosto de 2007
El osito amarillo
Disculpen que sea monotemático, pero es una bebé preciosa (igual que todos los bebés).
Alejandra insiste en elegirle cuidadosamente la ropa, y no me perdona si no le sacamos fotos con cada modelito.
Al fin y al cabo, son todas cosas que en un mes ya no le van a entrar, así que ¡hay que aprovechar ahora!
lunes, 6 de agosto de 2007
Día de visitas
El sábado, para festejar la primer semana de vida de Helena Sofía, recibimos visitas. Vinieron unos cuantos familiares, varios que no la conocían todavía (por las vacaciones de invierno, no habían ido a la clínica). Elegí solamente un par de fotos para no aburrir, aunque las demás están a disposición de los familiares.
Las dos hermanitas con papá...
... en el escritorio, frente a la computadora. Y si no, ¿En qué momento subimos las fotos al blog?
El escritorio es uno de los lugares más calentitos de la casa, y uno de los más usados también. Aunque tuve que reducir mi cuota, todavía paso buena parte de mi tiempo libre en mi banco ergonómico, frente a la computadora.
La ardillita
Capagris
Hace tiempo que quería incluir la foto de nuestra mascotita en el blog, pero no había tenido oportunidad de sacarle una buena.
Esta gata tiene más de 16 años, la tengo desde que era soltero. Ahora tiene un achaque digestivo atrás de otro, pero sigue mimosa y de buen humor, aunque no tan activa como cuando era un cachorro.
Es como una hija más, la hermanita mayor (y gris) de Helenita. Acá vemos cómo se queda pacientemente en la puerta mientras le damos de comer a la bebé (tiene prohibido pasar al dormitorio, o sea que sólo lo hace cuando no estamos mirando).
No hay mucho con qué comparar el tamaño, pero es más grande que Helena y pesa casi el doble.
En la catrera
Bebé en la luna
Ese almohadón llamado luna nos resulta super-práctico y se lo recomiendo a todas las madres en ciernes. No sólo se puede usar para apoyar el bebé en el momento de amamantar, también sirve para descansar la espalda en la cama. Su forma flexible también hace que rápidamente se pueda armar un soporte para dejar al bebecito apoyado sin temor de que se caiga.
jueves, 2 de agosto de 2007
En el cochecito
Este amplio cochecito Graco casi nuevo fue un préstamo de Emilio y Gabriela que agradecemos mucho (además de todos los consejos y el apoyo que nos dieron antes y durante el embarazo... y los que nos van a dar, con su hermosa experiencia de dos varoncitos y una nena).
Ahora que la bebé todavía no puede estar en sillita, usamos el coche en su posición horizontal para llevarla con nosotros a los distintos ambientes de la casa. ¡Es comodísimo!
Muchas veces, incluso, se queda durmiendo ahí para no arriesgarnos a que se despierte al moverla al catrecito.
En casa ¡por fin!
Alejandra está aliviada en la primer foto que sacamos en casa. Ya se armó el lugar en la cama, para darle el pecho a la bebé con soporte de almohadón de media luna y algunos almohadones más de soporte.
Al lado, no se ve más que la esquina pero está el catrecito que nos prestaron Dan y Viviana. Les estamos muy agradecidos por brindarnos la primera camita de la bebé, y su experiencia con Ezequiel y Julieta. No sé por qué, mi propuesta del cajón de manzanas no cayó tan bien.
Nada como estar de vuelta en casa ...
En el cambiador
Hace un tiempo, sacamos una foto de Carlos mirando el cambiador vacío y especulando.
Ahora, lo ve lleno de alegría.
Es increíble lo que disfruta Helenita que le cambiemos los pañales, yo tenía el recuerdo de que los bebés se molestan al cambiarlos.
Veremos qué pasa cuando empiece a desbordar el contenido de los pañalcitos, por ahora viene todo tranquilo aunque no nos faltó "la fuente de la alegría" alguna vez que el estímulo de sacar el pañal y limpiar hace que la nena aproveche justo ese momento para hacer pipí de nuevo.
¿Se puede decir pipí en este blog? ¿Es una mala palabra?
Souvenirs
Lamentablemente, es un poco a trasmano para la mayoría: es en Monte Grande, provincia de Buenos Aires.
Los bombones con relleno, buenísimos. Pero donde realmente se destacaba la calidad superior era en lo más simple: las tabletas de chocolate en distintas variedas, unas hojitas de chocolate con un tenue dejo de menta y unas con forma de gajos de naranja, que justamente tenían un dejo cítrico. Espectacular... ya volveremos a comprar.
Al fondo, los souvenirs. Unas tarjetas con un texto breve pero muy hermoso y emotivo, en una caja con el leoncito de su signo zodiacal y su nombre grabado en la tapa. Una preciosura todo, gentileza de la tía Pochi. Muchísimas gracias, quedaron varias que seguiremos repartiendo cuando empiecen a venir las visitas a casa.
Habitación en la Trinidad
Esta es una vista de la primera habitación donde estuvo Helenita, la 559 de la Trinidad.
La ventana siempre tenía vapor condensado, porque la calefacción estaba fuerte. Aparte de eso, la vista era bastante despejada.
La cunita transparente de la nursery era muy práctica, con los cajoncitos debajo con todo lo necesario para cambiarle los pañales.
Al fondo, el sofá donde pasé las noches, durmiendo de a ratitos cuando nadie interrumpía. No valía la pena pagar los $95 que costaba el armado de cama para el compañante, si ni siquiera iba a poder disfrutarla. Además, me parecía un abuso. $20 por las comidas del acompañante, no estaba tan mal, aunque lamentablemente casi siempre las comía frías. No entiendo por qué, si el horario de visitas termina a las 20 (y en general la gente se queda hasta las 20:30) insisten en traer la comida a las 19.
Aparte de estas pequeñas quejas, el servicio fue bastante bueno en la hotelería y muy bueno en la atención médica para Alejandra y la nursery y neonatología para Helenita.
Acostada, extendida
Acá es donde pueden "cansarse" de ver a la bebé con distintos modelitos y en distintas versiones de su posición más frecuente a lo largo del día: la horizontal. En general, tiene los ojitos cerrados, pero en alguna ocasión la pescamos mirando algo con ojos bien abiertos.
Aprecien la ropita, toda elegida por Alejandra. Yo ya asumí que soy un desastre para eso.
Con la primita, al fin
Hace meses que esperábamos este momento: Agustina Zumaia y Helena Sofía, juntas en la foto.
Agustinita tiene ya tres meses, es increíble lo que creció en ese tiempo. Pareciera que ya tiene el doble de tamaño que la recién nacida.
Con esta diferencia tan pequeña de edades, es de esperar que sean muy compañeras en todas las reuniones familiares.
A upa
Estas son las primeras fotitos de la bebé en su posición preferida: a upa. Los bebés nunca se cansan de estar en brazos, está científicamente demostrado.
A esta altura es fácil darle el gusto; pesa alguito más de 3 kilos y se puede manejar con una sola mano con bastante comodidad. Además, es la nueva chica del barrio y TODOS quieren alzarla.
Incluido yo.
Las dos abuelas
Con el abuelo Luis
Ahora que tengo una hijita, entiendo mucho mejor a este hombre y por qué hace lo que hace.
¡Muchas gracias, Luis!
La primera foto
¡Esta es la primera foto de Helena Sofía! Por primera vez el flash lastimó sus ojitos, y su imagen quedó capturada en bits de una memoria digital.
Fue un momento muy emotivo. Alejandra apenas recuperada de la cesárea y todavía con las piernas insensibles, no estaba en su mejor momento. Pero el placer de tener a su hijita en brazos era más grande.
Disculpas
Quiero pedirles disculpas a todos por este prolongado “silencio de radio”.
Sepan que estamos todos bien: el martes 31 por la mañana nos dieron las respectivas altas en la clínica y el abuelo Luis se hizo un rato para acudir a la Trinidad y llevarnos a casa. Así tuvo el placer de ver el primer paseo en coche de Helenita (lástima que estaba manejando y no pudo ver mucho).
Llegar a casa fue mucho mejor, un verdadero placer. No más enfermeras, no más gente entrando en cualquier momento (doctores, nurses, enfermeras, camareras e inclusive una fotógrafa, una promotora de OSDE y una persona del sanatorio que quería vendernos el servicio de Internet en la habitación).
Ahora estamos solos los dos flamantes padres, armando nuestras nuevas rutinas. Alejandra se preocupa sobre todo de la lactancia, que en este momento requiere casi media hora de preparación previa entre paños calientes y masajes. Estuvimos trabajando con el Conde Calostro y ahora tratamos de esquivar la Monstruosa Mastitis. Yo no entiendo mucho de eso, para mí son como los luchadores de Titanes en el Ring (referencia sólo para nuestra generación). Esto es además cada cuatro horas, lo que no nos deja mucho tiempo.
Yo hago un poco de todo, trato de organizar y mantener las cosas en vereda. La verdad, dormimos casi nada pero estamos muy contentos.
Todo esto nos requiere mucha energía y mucho esfuerzo de adaptación y muy poco descanso. Por eso, en este momento, nos estamos encerrando adentro y nos aislamos un poco. Puede ser un poco antipático, pero ya comprobamos en la clínica que atender a la gente, por más que nos encanta que nos visiten y nos llamen, AGOTA.
Así que bajé los timbres de todos los teléfonos y los celulares. La gente que llama puede dejar mensajes en el contestador, que anda bárbaro, y cuando tenemos un rato los escuchamos. Cuando tenemos tiempo y ganas (en mi caso, casi nunca: saben que odio el teléfono) respondemos los llamados.
Todavía no pude tampoco responder los emails, tengo más de 60 y cada uno merece una respuesta, aunque sea mínima. Es impresionante el cariño que nos demuestran todos, lo agradecemos mucho, y les pedimos que tengan un poco de paciencia mientras nos recuperamos y ganamos experiencia.
También seguimos generando fotos, que me muero de ganas de compartir con ustedes: ni siquiera tuve tiempo de subirlas a este blog. Pero ya falta muy poco.